jueves, 17 de julio de 2008

FINAL II

Reprimir el instinto. Acabar con esa pequeña parte del encéfalo que cosquillea después de la segunda pitada. Esa que me llena de escalofríos justo en este momento. Ni una cosa ni la otra. ¿Vos quien sos? Viste vos que no confiabas... ¿Te gusta Mandrake Wolf? Ni una cosa ni la otra. ¿Ni Mandrake ni Wolf? Reprimir el instinto, dije. Ninguna explosión. Gustarme, lo que se dice gustarme, no. Vi el disco en tu casa, me lo mostraste, estaba en el piso creo. ¿Contenta niña? Tenés cara rara. Tengo cara de mucho vino. Cuidado con la noche. Anda despacio, esta espesa la niebla. La concha de tu madre. ¿Otro amiguito?. Me van a conseguir una Laptus por tres mil pesos. Laptop se dice. Bueno, una Lastop. Memoria instintiva. Honestidad instintiva. Todo es instintivo por naturaleza. ¿Preferís ir sola que con nosotros? Como quieras, soy yo la que tiene la culpa. No nacimos para robar. Yo nací para fumar porro al sol en un desierto de concreto. Que exagerada que sos. Exagerada no, poética. Nunca en tu vida escribiste un poema como la gente, no jodas. Cosquillas no, calambres. Se acalambra justo detrás de la oreja y cuando la contracciones desaparecen con un bostezo, se llena el cuerpo de un hilo finísimo que me mueve del asiento. Este superman es un viejo, mala persona, actor y sin capa roja. No te enojes gallinita, te quiero. ¿Querés ticholos? No, no quiero. Querés si pero no te animas a comprárselos al señor. Si los compro yo te comes tres. Si yo tuviera la edad que tienen ellas pagaría para estar ahí. Comenzaría con un pequeño orificio para que se escape el humo que tengo flotando entre las neuronas. Luego, un surco para guiarlo lejos. A la cuenta de tres desaparece la morbosidad. Adiós a mi lascivia. Reprimir el instinto. Soñé que el viejo Vila y la abuela discutían sentados en esta mesa. Pero era todo normal, me asusté.¡Ah! pero que paseo más feo este. Si fuera hombre pasaría todo el día metido en el bar de tu esposo. Mira vos, otro grillito. ¿Qué querés tomar? Dame una cañita. No, caña no Valentina, hace mal. Reprimite.

1 comentario:

dividida dijo...

cuántos finales?
cuántos libros con marcadores negros?
cuántas cruces?
cuántos-cuántas?
un jardín entre lilas un par de niñas esperando tomar la decisión menos dolorosa.
o acaso era reunión de tés en el jardín?